LEYES DE MURPHI PARA EMBARAZADAS!!


1. Quedarás embarazada justo cuando hayas
perdido los 10 kg que tanto te costaron perder.

2. Los futuros padres siempre quedarán
sorprendidos por el resultado del "test de
embarazo" como sino hubieran sabido lo que
estaban haciendo.

3. Desde el momento que sepas que estás
embarazada, comenzarás a ver mujeres embarazadas por doquier.

4. A partir de tu primera consulta, comenzarás a
hablar en "código de embarazada" y cuando los simples mortales te pregunten cuanto tiempo
tienes de embarazo, responderás "12 semanas, 2
días" y nunca "3 meses".

5. No anuncies tu embarazo hasta que escuches
risas disimuladas cada vez que te das la vuelta.
(cierto)

6. Toda embarazada descubrirá que tiene síntomas, síndromes y malestares que no figuran en ningún libro (y de los que su médico no escuchó hablar
jamás)

7. Toda embarazada se propondrá firmemente que sus hijos no serán malcriados como los hijos de los otros (bla bla bla)
8. La mejor amiga de una embarazada, siempre
será otra embarazada, aunque nunca se hayan
visto...

9. La capacidad de atención del futuro padre con respecto de la embarazada es inversamente
proporcional al real malestar que ésta sufra.

10. Cuanto mayor sea el interés de los padres en
saber el sexo del bebé antes del parto, más tiempo durará el niño ocultándolo.

11. El único consejo que no hayas seguido durante
el embarazo, será el que recordarás cuando algo no salga como lo esperas.
Aunque nadie quiere tu trabajo, todos piensan que pueden hacerlo mejor que tú... o al revés.

12. justo en el momento que tu marido coloca la
mano sobre tu panza, el bebé deja de moverse, y
en el mismo instante en que la quite, el bebé pega
una gran patada.

13. Nunca faltará que alguien díga que "el niño
será un gran futbolista"

14. El noveno mes tiene 60 días!
15. El período de gestación de un elefante es de dos años, en el humano, sólo lo parece.
16. Nunca faltará alguien que te diga: "¿todavía
estás embarazada?"

17. Las embarazadas se ríen y se enternecen con
chistes o situaciones repetidas que nunca antes les había causado risas o ternuras.

18. Cuanto más avanzado esté el parto, más
complejo y extenso será el formulario de admisión
en la clínica.

19. Por muy regulares y fuertes que sean las
contracciones, la futura madre estará más tranquila que su acompañante... hasta llegar al hospital...

20. Por largo y doloroso que haya sido el parto, te
dolerá más cuando le pinchen el talón a tu bebé.

21. El trabajo de parto es como hacer una parrilla:
aunque es la mujer que hace el trabajo duro, el
hombre es quien recibe las felicitaciones y celebra
con sus amigos y familiares por "el trabajo
realizado".

22. Justo cuando te den los cólicos después del
parto, tendrás la visita en tu cuarto de todos tus
compañeros de trabajo.

23. Si decides a ser precavida y comprar una gran reserva de pañales para cuando nazca tu bebé,seguramente la talla que le compraste no le servirá.
24. Si la talla que le compraste le sirve a tu bebé,
seguramente será alérgico a la marca.



A VER CUANTAS DICEN, A MI ESTO NO ME PASARÁ?? :D

Mi experiencia con la operacion "Adios pañales"


Hoy os quiero contar mi experiencia sobre el tema de "Adios pañales".
En una entrada anterior pedia consejos a madres que ya hayan pasado por esta etapa y la verdad me llovieron las experiencias y consejos así que tambien quiero aprovechar para agradecerles por vuestros consejos.
La verdad que hoy por hoy puedo decir que me a tomado 4 largos meses de paciencia con mi niña de que me avise cada vez que siente la necesidad de hacer pis y que a parte de avisarme ¡ya va solita al wc!, no utiliza orinal, ella sola dio el paso -despues de dos meses aproximadamente-.

Faltaba un mes para que empiece la escuela y yo ya me veía cada dia con la profesora diciendome que la niña se había hecho pis sobre la ropa, pero la verdad en ese mes de verano que aun tenia de margen si que le costo a mi niña entender que tenia que ir al wc cada vez que lo necesitara, pero hasta que al fin lo entendió, el primer mes si que venia con la ropa cambiada por que se le habia "escapado"  pero como yo no me enfadaba sino que le decía que no pasaba nada que "habia sido un accidente" ya no se agobiaba ella por que reconozco que al principio me enojaba y ella se sentía mal, entonces decidí llenarme de paciencia y hacerle saber que no pasaba nada pero que procurara avisar.

Mi dia a dia empezaba por despertarla en la mañana y llevarla a hacer pis, de ahi aprovechaba a que se lavara los dientes -aunque no siempre se despertaba con humor y me costaba mas-, despues le servia el desayuno y si es mucho liquido nuevamente la llevaba al lavabo, si no hacia nada esperaba a despues del almuerzo o sino cada media hora le iba llevando y la sentaba en el orinal.
Cuando ya empezaron las clases la rutina se mantuvo mas o menos igual pero por poco tiempo. Cuando se levantaba por la mañana la llevaba al lavabo para que haga pis y lo hacia, después lavaba sus dientes, la vestía, desayunaba y la llevaba a clases. En la escuela la profesora si me decía que la niña se hacia pis y yo le dije q si, que ella aun no avisaba -mas que todo para que ella lo tuviera en cuenta y así estaba mas pendiente de preguntarle-.
Después de casi un mes de clases ya mi hija avisa cada vez que siente que necesita hacer pis, eso si, me pide siempre que la acompañe al lavabo.
Cuando llega de clases a casa le pregunto si quiere hacer pis y si me dice que no respeto su decisión, después de comer, le vuelvo a preguntar teniendo en cuenta que a bebido cosas liquidas, y si me dice que no, no insisto.
Eso sí, nunca que dejado en casa de usas braguitas desechables, por que no quería verme con fregona en mano todo el día, al principio si gaste mucho en braguitas pero ya hoy una le dura todo el día, solo cuando va al cole le pongo su braguita de tela pero como ella ya controla pasan secas todo el día, incluso en las noches, hace pis antes de acostarse y a la mañana siguiente cuando se despierta me dice que quiere hacer pis y va al lavabo, no moja las braguitas salvo algún día que duerma hasta mas tarde que no se levanta pronto :D.

Mis maneras para que ella se sienta a gusto en el lavabo han sido de dejarle algún juguete cuando esta sentada en el orinal o la tablet el tiempo que ella crea que necesita estar sentada ahi, no le meto presión por que lo que hacia era decir "no quiero" a los dos minutos de haber salido del lavabo se mojaba la ropa.
Cambien el dejarla que me acompañara cada vez que yo iba a hacer pis, yo le decía "me hago pis, me acompañas?, así de esta manera ella ve que no es malo ir lavabo y que si lo necesita me puede pedir ayuda y es lo que hace ahora, me pide que la acompañe para q le suba las braguitas y sobre todo vigilarla de que no me haga alguna travesura en el lavabo.

Recalco que e tenido mucha paciencia en cuanto a este tema, me tocado contar hasta diez, sonreirle a la niña para que no relacione el hacer pis con algo malo o que se sienta culpable por no saber cuando tiene ganas y no se sienta agobiada y que después directamente me diga que no quiere ir al lavabo.
Resumiendo, dandole confianza absoluta.

Espero que a alguna mama que se encuentre en esta situacion o que pronto tengan que empezar esta etapa le sirva de ayuda.

Un Saludo.

Yogures adaptados para bebes



¿Aportan algo el yogur adaptado para bebés? Esto es parte de una idea más amplia. ¿Cómo introducir los lácteos de vaca en la dieta infantil?

Cuando hablamos de introducción de la alimentación complementaria hay tantas opciones correctas como bebés. No existen normas absolutas. Todo lo que se diga en este campo es orientativo.
Un producto que suscita dudas en los padres es el yogur.

¿Qué es el yogur?

Es un producto producido a partir de la fermentación de la leche. El yogur tiene varios puntos a favor:

  1. Los gérmenes que fermentan la leche son lactobacilos. Estos bichitos son parte de la flora habitual del intestino de los lactantes. Y son gérmenes no agresivos. Como en nuestro intestino tiene que haber microbios, que estos lactobacilos representen una parte importante de esa flora se considera beneficioso. Luego tomar yogur, puede serlo porque siembra de forma regular lactobacilos en el intestino.
  2. El proceso de fermentación transforma la lactosa (el azúcar natural de la leche) en ácido láctico. Como hay gente que tiene intolerancia a la lactosa, el yogur es un a forma de tomar lácteos para muchas de estas personas evitando molestias.
  3. El proceso de fermentación hace una ligera degradación de las proteínas de la leche que la hace más fácil de digerir.

¿Y el yogur adaptado?

Es un yogur que en lugar de elaborar con leche de vaca normal se hace fermentando leche de continuación artificial.
Es decir, tomamos leche tipo 2 (la que recomendamos usar a partir de los 6 meses en niños que toman lactancia artificial), y la fermentamos para hacer yogur.
¿Y para qué? La idea es que cuando introducimos la leche en los niños lo hacemos de forma gradual, ya que muchos niños van adquiriendo la capacidad de digerir las proteínas de la leche de vaca poco a poco. Estas proteínas son más difíciles de digerir para los humanos que las de la leche materna (las terneras son rumiantes y tienen un sistema digestivo capaz de digerir cosas que para el ser humano es imposible).
Por eso, cuando se escoge dar lactancia artificial, se usan leches que provienen de la de vaca pero se adaptan para que un bebé pueda digerirlas. Y hay distintas leches para edades diferentes. La de inicio tiene las proteínas más pequeñas para que resulten más fáciles de digerir, las de continuación algo más grandes. El Yogur normal sería un escalón intermedio entre la leche de continuación y la leche entera de vaca.
Ya que el proceso de fermentación fracciona un poco las proteínas, el yogur para bebés sería un escalón entre la leche de inicio y la continuación.

¿Hace falta tanto escalón? Mi opinión es que no.

Mi opinión es que estos yogur para bebés existen porque son muy rentables. Pero no aportan nada. Que no son malos, pero a mi modo de ver puede introducirse la leche sin gastarse en un yogur para bebés lo que valen 4 normales.
Yo creo que introducir la leche con 4 escalones es más que suficiente (en los que toman leche artificial):
  1. Leche de inicio hasta los 6 meses.
  2. Leche de continuación desde los 6 meses al año.
  3. Yogur en aquellos niños que tras un par de semanas de tomar leche de continuación no tienen síntomas de que les siente mal.
  4. Leche de vaca entera a partir del año.

COMO DEJAR EL PAÑAL: TODO UN RETO DE PACIENCIA PARA LAS MADRES



Hola mamis! hoy soy yo la que necesito consejos, tips y maneras de ayudar a mi pequeña a que deje los pañales.
Tiene 2 años y 8 meses y en Septiembre entra a la escuela al P-3 -y como primeriza que soy la verdad- me han dicho que desde que van a la escuela ya no usan pañales, yo la verdad que le iba ayudando muy poco a poco a dejar los pañales para no agobiarla ni agobiarme con el tema, pero ahora me encuentro con el tiempo que corre en contra nuestra.
Tengo muchisima paciencia con ella por que se que no es facil, es una nueva etapa que empieza, pero se niega a dejar el pañal, cuando la siento en el orinal unas veces si que hace pis y otra veces llega tarde :( jejeje, pero asi mismo hay ocasiones en que se niega a utilizarlo y a que le ponga braguitas, me pide que le ponga el pañal.
E leido mucho sobre esta etapa pero como se dice "no es lo mismo la ciencia que la experiencia" me gustaria saber que haríais vosotras o que habéis hecho las mamis que ya han pasado por este proceso con vuestros hijos.
Muchas gracias de antemano y Felices Vacaciones de Verano

DEPRESION POST PARTO

Es una depresión de moderada a intensa en una mujer después de que ha dado a luz y se puede presentar poco después del parto o hasta un año más tarde. La mayor parte del tiempo ocurre dentro de los primeros tres meses después del parto.

Causas

La causa exacta de la depresión posparto se desconoce. Los cambios en los niveles hormonales durante y después del embarazo pueden afectar el estado anímico de una mujer. Muchos factores distintos a los hormonales también pueden afectar el estado de ánimo durante este período.
  • Cambios en el cuerpo a raíz del embarazo y el parto.
  • Cambios en las relaciones laborales y sociales.
  • Tener menos tiempo y libertad para sí misma.
  • Falta de sueño.
  • Preocupaciones acerca de su capacidad para ser una buena madre.
Usted puede tener mayores probabilidades de experimentar depresión posparto si:
  • Tiene menos de 20 años.
  • Actualmente consume alcohol, alucinógenos o fuma (también ocasionan riesgos serios para la salud del bebé).
  • No planeó el embarazo o tuvo sentimientos contradictorios acerca de éste.
  • Tuvo depresión,  o un trastorno de ansiedad antes del embarazo o en un embarazo anterior.
  • Vivió un hecho estresante durante el embarazo o el parto, por ejemplo, una enfermedad, muerte o padecimiento de un ser querido, un parto difícil o de emergencia, un parto prematuro o una enfermedad o anomalía congénita en el bebé.
  • Tiene un familiar cercano que haya experimentado depresión o ansiedad.
  • Tiene una mala relación con la pareja o es soltera.
  • Tiene problemas financieros o de vivienda.
  • Tiene poco apoyo de la familia, los amigos o la pareja.

Síntomas

Los sentimientos de ansiedad, irritación, tristeza con llanto e inquietud son comunes en las dos primeras semanas después del embarazo. Estos sentimientos a menudo se denominan "depresión puerperal". Estos síntomas casi siempre desaparecen pronto, sin necesidad de tratamiento.
La depresión posparto puede ocurrir cuando la depresión puerperal no desaparece o cuando los signos de depresión comienzan uno o más meses después de dar a luz.
Los síntomas de depresión posparto son los mismos que los síntomas de la depresión que ocurre en otros momentos en la vida. Junto con un estado anímico triste o deprimido, usted puede tener algunos de los siguientes síntomas: 
  • Agitación e irritabilidad
  • Cambios en el apetito
  • Sentimiento de inutilidad o culpa
  • Sentirse retraída o desconectada
  • Falta de placer o interés en todas o en la mayoría de las actividades
  • Pérdida de la concentración
  • Pérdida de energía
  • Problemas para realizar las tareas en el hogar o el trabajo
  • Ansiedad considerable
  • Pensamientos de muerte o suicidio
  • Dificultad para dormir
Una madre con depresión posparto también puede:
  • Ser incapaz de cuidar de sí misma o de su bebé.
  • Sentir temor de quedarse sola con el bebé.
  • Tener sentimientos negativos hacia el bebé o incluso pensar en hacerle daño. (Anque estos sentimientos son aterradores, casi nunca se materializan. No obstante, usted debe comentarle al médico al respecto inmediatamente.)
  • Preocuparse intensamente por el bebé o tener poco interés en él.

Pruebas y exámenes

No existe un examen único para diagnosticar la depresión posparto. El diagnóstico se basa en los síntomas que usted le describe al médico o al personal de enfermería.
Las mujeres con depresión posparto deben hacerse exámenes de sangre para buscar causas físicas de dicha depresión.

Tratamiento

Una madre primeriza que tenga cualquier síntoma de depresión posparto debe ponerse en contacto con el médico o el personal de enfermería en seguida para conseguir ayuda.
Aquí se presentan algunas otras sugerencias útiles:
  • Solicíteles a su compañero, familia y amigos ayuda con las necesidades del bebé y el hogar.
  • No esconda sus sentimientos. Hable acerca de ellos con su compañero, familia y amigos.
  • No haga ningún tipo de cambios mayores en su vida durante el embarazo o inmediatamente después de dar a luz.
  • No intente hacer demasiado o ser perfecta.
  • Saque tiempo para salir, visitar a los amigos o pasar tiempo sola con su compañero.
  • Descanse lo más que pueda. Duerma cuando el bebé esté durmiendo.
  • Hable con otras madres o únase a un grupo de apoyo.
El tratamiento para la depresión después del parto con frecuencia incluye medicamentos, terapia o ambos. El hecho de que usted esté amamantando o no influirá en qué medicamentos le recomiende el médico. A usted le pueden recomendar un especialista en salud mental. La terapia conductual cognitiva (TCC) y la terapia interpersonal (TIP) son tipos de psicoterapia que a menudo ayudan para la depresión posparto.
Los grupos de apoyo pueden ser útiles, pero no deben reemplazar a los medicamentos y la psicoterapia si usted tiene depresión posparto.
Tener un apoyo social bueno de la familia, los amigos y los compañeros de trabajo puede ayudar a reducir la gravedad de la depresión posparto.


Expectativas (pronóstico)

Los medicamentos y la psicoterapia profesional con frecuencia pueden reducir o eliminar los síntomas de manera efectiva.

Posibles complicaciones

Sin tratamiento, la depresión posparto puede durar meses o años.
Las complicaciones potenciales a largo plazo son las mismas que en la . La depresión posparto que no recibe tratamiento puede ponerla en riesgo de hacerse daño o dañar al bebé.

Cuándo contactar a un profesional médico

Coméntele al médico si experimenta algo de lo siguiente:
  • Su depresión puerperal no desaparece después de dos semanas
  • Los síntomas de depresión se vuelven más intensos
  • Los síntomas de depresión empiezan en cualquier momento después del parto, incluso muchos meses más tarde
  • A usted se le dificulta realizar las tareas en el trabajo o en la casa
  • No puede cuidar de sí misma ni de su bebé
  • Tiene pensamientos de hacerse daño a sí misma o a su bebé
  • Tiene pensamientos sin asidero en la realidad o empieza a oír o ver cosas que otras personas no ven ni oyen
No tenga miedo de buscar ayuda inmediatamente si se siente abrumada y con temor de que pueda hacerle daño al bebé.

Prevención

El hecho de tener un buen apoyo social por parte de la familia, los amigos y los compañeros de trabajo puede ayudar a reducir la gravedad de la depresión posparto, pero es posible que no la prevenga.
Las mujeres que tuvieron depresión posparto después de embarazos pasados pueden ser menos propensas a padecerla de nuevo si comienzan a tomar antidepresivos después del parto. La psicoterapia también puede ayudar a prevenirla.

MEDIDAS A TOMAR ANTES DEL EMBARAZO

La mayoría de las mujeres saben que necesitan ver a un médico y realizar cambios en el estilo de vida mientras están embarazadas, pero es igualmente importante empezar a hacer cambios antes de quedar en embarazo. Estos pasos le ayudarán a prepararse a sí misma y a su cuerpo para el embarazo, además de darle una mejor oportunidad de tener un bebé saludable.

Consulte con el médico

Consulte con el médico antes de quedar embarazada. Incluso si siente que está saludable y lista para un embarazo, el médico o la enfermera obstetra pueden hacer mucho de antemano para ayudarle a prepararse.
  • Ellos analizarán su salud actual, su historia clínica y los antecedentes de salud de su familia. Algunos problemas de salud en su familia pueden transmitírselas a sus hijos. El médico puede remitirla donde un asesor en genética.
  • Puede necesitar exámenes de sangre o puede que necesite ponerse al día con las vacunas antes de quedar embarazada.
  • El médico o la enfermera obstetra hablarán con usted respecto a medicamentos, hierbas y suplementos que pueda estar tomando, ya que pueden afectar al feto. El médico puede recomendar cambios de medicación antes de quedar embarazada.
  • Los problemas de salud crónicos, como el asma o la diabetes, deben estar estables antes de quedar embarazada.  

Suspenda el cigarrillo, el alcohol y las drogas. Reduzca la cafeína

Si fuma, toma alcohol o consume drogas, debe parar antes de quedar embarazada. Esto puede:
  • Dificultar el hecho de quedar embarazada.
  • Aumentar la probabilidad de tener un aborto espontáneo (perder el bebé antes de nacer).
Si necesita ayuda para dejar el cigarrillo, el alcohol o las drogas, hable con su médico.
Incluso en pequeñas cantidades, el alcohol puede causarle daño a un feto en crecimiento (bebé por nacer). Beber alcohol mientras esté embarazada puede causar problemas a largo plazo para su bebé, como discapacidad intelectual, problemas de conducta, dificultades de aprendizaje y anomalías faciales y cardíacas.
Fumar es malo para el feto y pone al niño en mayor riesgo de problemas de salud más adelante en la vida.
  • Las mujeres que fuman durante el embarazo son más propensas a tener bebés con bajo peso al nacer.
  • Fumar también hace que sea más difícil para usted recuperarse de su embarazo.
Las drogas que no son recetadas por un médico (incluidas las drogas ilícitas) pueden ser peligrosas si las toma en cualquier momento de su vida.
Usted debe también reducir la cafeína cuando esté tratando de quedar embarazada. Las mujeres que consumen más de 2 tazas de café o 5 latas de refresco al día pueden tener dificultades para quedar embarazadas y una mayor probabilidad de aborto espontáneo.  

Consuma una dieta balanceada

Una dieta balanceada siempre es buena para usted. Usted debe seguir una dieta saludable antes de quedar embarazada. Unas pautas sencillas son:
  • Reduzca las calorías vacías, los edulcorantes artificiales y la cafeína.
  • Coma alimentos que sean ricos en proteína.
  • Las frutas, las verduras, los granos y los productos lácteos la harán más saludable antes de quedar embarazada.
Igualmente, reduzca la cantidad de pescado que consume. Los mariscos contienen mercurio, que puede causar anomalías congénitas si se consume en grandes cantidades. Las mujeres embarazadas deben:
  • Comer no más de 12 onzas (340 gramos) de pescado a la semana.
  • Evitar los peces grandes de mar, como el tiburón y la lubina.
  • Reducir la ingesta de atún a una lata de atún blanco o filete de atún por semana o dos latas de atún claro por semana.
Si tiene bajo peso o sobrepeso, es mejor tratar de alcanzar su peso ideal antes de quedar en embarazo.
  • Tener sobrepeso durante el embarazo puede aumentar las probabilidades de problemas, como hipertensión arterial, diabetes, aborto espontáneo, muerte fetal y anomalías congénitas.
  • No es una buena idea tratar de bajar de peso durante el embarazo.  

Tome vitaminas y ácido fólico

Tome un suplemento de vitaminas y minerales que incluya al menos 0.4 miligramos (400 microgramos) de ácido fólico.
  • El ácido fólico reduce el riesgo de anomalías congénitas, especialmente problemas en la columna vertebral del bebé.
  • Empiece a tomar una vitamina con ácido fólico antes de intentar quedar embarazada.
  • Evite las altas dosis de cualquier vitamina, especialmente las vitaminas A, D, E y K. Estas vitaminas pueden causar anomalías congénitas si usted toma más de las cantidades diarias normales recomendadas.
No tomar suplementos de hierbas. No existen buenos estudios sobre la seguridad de las hierbas durante el embarazo.  

Haga ejercicio

Hacer ejercicio antes de quedar embarazada puede ayudar a su cuerpo a hacerles frente a todos los cambios por los que usted pasará durante el embarazo y el parto. La cantidad de ejercicio que usted sea capaz de hacer durante el embarazo debe basarse en su salud general y cuán activa es usted antes de quedar embarazada. Hable con el médico respecto a qué tipo de ejercicio y cuánto es bueno para usted.

El estrés, el descanso y la relajación

Mientras esté tratando de quedar embarazada, intente relajarse y estar lo más libre posible del estrés. Pregúnteles al médico o a la enfermera obstetra respecto a técnicas para reducir el estrés. Descanse y relájese mucho. Esto puede facilitarle más el hecho de quedar en embarazo.

COMBINAR EL TRABAJO Y LA MATERNIDAD: CONSEJOS.

La mamá moderna tiene que desempeñar muchos roles en un mismo día: mamá, mujer de negocios o empleada, esposa, amiga, hija y alguno más, dependiendo del caso. No es fácil, pero se puede hacer y de hecho, se hace.


Sugerencias para ayudarte a combinar el trabajo con la maternidad:
  • Haz números y en el caso de que tu sueldo se vaya todo en pagar la guardería, replantéate tu trabajo. Quizá te convenga más trabajar desde casa o cambiar de profesión.
  • Si vives en pareja, repartiros el cuidado de los niños y las tareas de la casa de la manera más equitativa, para que ninguno de los dos se agobie.
  • Contrata alguien para limpiar y hacer los recados. De lo contrario, emplea trucos para mantener la casa ordenada y ahorrar tiempo, como usar edredones en lugar de colchas y sábanas.
  • Procura desconectar por completo de tu trabajo cuando llegues a la casa. La calidad del tiempo que pasas con tus hijos es más importante que la cantidad.
  • Desde pequeños, enseña a tus hijos que la familia es un equipo y delega en ellos tareas y responsabilidades, como ordenar su cuarto.

  • Organízate y prepara cosas la noche anterior para evitar el corre-corre típico de tantos hogares en los que ambos miembros de la pareja trabajan.
  • Aprecia a tu pareja. Si tu relación es fuerte, tendrás más apoyo y te resultará más fácil combinar el trabajo con la maternidad.
  • Haz ejercicio para evitar que se acumule el estrés. Procura elegir deportes que puedes compartir con tus hijos y así pasar tiempo con ellos.
  • No permitas que nadie consiga que te sientas culpable por ser una mamá trabajadora. Ya sea porque necesites el sueldo o bien porque te guste tu profesión, puedes combinar ambas cosas con éxito.
  • Recuerda que eres el mejor modelo para tus hijos. Tus hijos varones al verte trabajar y atender a la familia, aprenderán que las mujeres podemos ser profesionales a la vez que amas de casa. Tus hijas, cuando sean adultas, serán fuertes y emprendedoras, como tú.

SINTOMAS DEL EMBARAZO

¿Podrías estar embarazada? Lo más probable es que no empieces a sentir los síntomas del embarazo hasta que se te haya retrasado el periodo, o hasta una o dos semanas después. 
Si no anotas las fechas de tu ciclo menstrual o si varían mucho de un mes al otro, puede que no estés segura de cuándo esperas tu próximo periodo. Pero si empiezas a sentir los síntomas que leerás a continuación — aunque no los tengas todos — y se te ha retrasado el periodo, es muy probable que estés embarazada. Hazte una prueba del embarazo en casa y lo sabrás con seguridad. 


Los primeros 10 síntomas del embarazo:

1. Sensibilidad e hinchazón en los senos 

Uno de los primeros síntomas del embarazo es la hinchazón y sensibilidad en los senos provocada por el aumento en los niveles hormonales. Esta sensibilidad o dolor puede ser como una versión exagerada de lo que sientes antes de tus periodos. A partir del primer trimestre esta incomodidad disminuirá significativamente, a medida que tu cuerpo se adapta a los cambios hormonales.

2. Cansancio
¿Has estado muy cansada últimamente? O mejor, ¿completamente exhausta? Nadie sabe a ciencia cierta el motivo de la fatiga típica del comienzo del embarazo, pero es posible que tu soñolencia se deba al rápido aumento en los niveles de la hormona progesterona

3. Pérdida de sangre debido a la implantación de ovulo.
A algunas mujeres les sale un poco de sangre por la vagina 11 ó 12 días después de haber concebido (alrededor de la fecha en que te darás cuenta que se retrasó tu menstruación). Aunque no se sabe con seguridad cuál es el motivo de esta leve pérdida de sangre, se cree que podría resultar de la implantación del óvulo fertilizado en el interior del útero — cuyo revestimiento tiene gran irrigación sanguínea —, lo cual empieza a ocurrir seis días después de la fertilización . 

Esta cantidad de sangre es muy pequeña (notarás algunas gotitas o manchas rojas, rosadas o de un color marrón rojizo en tu ropa interior) y no dura más que uno o dos días. De cualquier forma, debes informarle a tu doctor si sangras, aunque sea poco, sobre todo si a la vez sientes dolor, ya que esto podría indicar la presencia de un embarazo ectópico (extrauterino).

4. Náuseas o vómitos.
Si eres como la mayoría de las mujeres, no empezarás a sentir náuseas hasta más o menos un mes después de haber concebido (aunque hay unas pocas afortunadas que nunca las sienten). Pero algunas mujeres empiezan a sentir estas molestias un poco antes. Las náuseas y los vómitos típicos del embarazo pueden ocurrir a cualquier hora del día: mañana, tarde o noche. 
Lo bueno es que cerca de la mitad de las mujeres que padecen de náuseas dejan de tener estos síntomas al empezar el segundo trimestre. Para la mayoría de las demás mujeres, las náuseas tardarán más o menos otro mes en aliviarse. 


5. Desagrado a ciertos olores.
Si quedaste embarazada hace poco, es normal que ciertos olores, perfumes y los aromas de algunas comidas te repugnen y hasta te provoquen náuseas. Aunque no se sabe con seguridad, esto podría ser uno de los efectos colaterales del rápido aumento en los niveles de estrógeno en tu organismo. También podrías notar que algunas comidas que antes disfrutabas, ahora te causan repulsión. 

6. Hinchazón abdominal.
Los cambios hormonales que ocurren al principio del embarazo podrían hacer que te sientas hinchada, como a veces pasa un poco antes de la llegada de tu periodo. Por este motivo, la ropa te puede apretar en la cintura desde muy temprano en el embarazo, aunque tu útero aún esté muy pequeño. 

7. Ganas de orinar frecuentemente

Poco tiempo después de quedar encinta puede que te pases el día corriendo al baño. ¿A qué se debe esto? El principal motivo es que durante el embarazo aumenta la cantidad de sangre y otros líquidos que circulan por tu cuerpo, lo cual significa que tus riñones están trabajando mucho más, y más fluidos se están acumulando en tu vejiga. 
Podrías empezar a sentir este síntoma a partir de la semana 6 del embarazo, y lo más probable es que esta sensación aumente a medida que progrese tu embarazo y tu bebé crezca, ejerciendo mayor presión sobre la vejiga. 

8. Retraso de la menstruación 

Si tu ciclo menstrual suele ser bastante regular y de repente se retrasa tu periodo, probablemente te harás una prueba del embarazo mucho antes de que empieces a tener cualquiera de los síntomas anteriores. Pero si tus reglas no son regulares y no tienes la costumbre de anotar las fechas de tu ciclo, las náuseas, la sensibilidad en los senos y las idas frecuentes al baño podrían ser las primeras señales de que estás embarazada, antes siquiera de que te des cuenta del retraso de tu periodo. 


9. Tu temperatura basal permanece elevada.
Si anotas con regularidad la temperatura basal de tu organismo (tu temperatura al despertarte) y notas que ésta permanece elevada por 18 días seguidos, lo más probable es que estés embarazada. 


10. La evidencia: el resultado positivo de tu prueba de embarazo casera 
Diga lo que diga en la caja, muchas pruebas de embarazo caseras no logran detectar la mayoría de los embarazos hasta aproximadamente una semana después del retraso del periodo. O sea que, si decides hacerte una prueba antes de esa fecha y el resultado es negativo, vuelve a hacértela unos días después. 

Una vez que el resultado sea positivo, haz una cita con tu médico. 

RETOS DE LA LACTANCIA: ¿Puedo seguir amamantando?




  • Claro que sí. Pero no tienes por qué sufrir. Obtén ayuda lo antes posible buscando una asesora de lactancia que te ayude a solucionar el problema. Pregunta en el hospital donde diste a luz si ofrecen este servicio (muchos hospitales lo ofrecen de forma gratuita) también puedes preguntar a una enfermera especializada. 


  • Si te duelen tanto los pezones que simplemente no puedes darle el pecho a tu bebé, considera la posibilidad de tomarte un descanso extrayéndote leche por un período de 12 a 24 horas. Usa un buen extractor de leche y empieza en el nivel mínimo de succión. 

  • Rocía un poquito de aceite de oliva en tus pezones y en la areola antes de empezar a sacarte la leche. Esto ayudará a que los pezones se deslicen con mayor facilidad durante la extracción a la vez que ayuda a que se sanen. 

RETOS DE LA LACTANCIA: ¿Qué puedo hacer para ayudar a que se sanen mis pezones?

  • Prueba las conchas para senos que se usan por adentro del brasier mientras no estás amamantando. Sirven para evitar que la tela del brasier roce contra los pezones a la vez que permiten que circule el aire.

  • Rocía un poco de tu propia leche en los pezones y deja que se sequen al aire libre. También puedes aplicarte en los pezones después de cada toma una pequeña cantidad de una lanolina pura que se vende especialmente para esto.

  • Las compresas de agua y sal pueden ser curativas. Para hacerlas, disuelve 1/4 de cucharadita de sal en 1 taza de agua templada y aplícate esta mezcla en los pechos con gasas o almohadillas de maquillaje por unos diez minutos, tres o cuatro veces al día.

  • A algunas mamás también les gustan las gasas de hidrogel que están hechas a base de agua o glicerina para humectar y proteger la piel, y algunas madres encuentran que su temperatura fresca les trae gran alivio.

  • Pregúntale a tu doctor si puedes tomar algún medicamento para el dolor, si lo necesitas. Lo más seguro es que puedas utilizar el mismo medicamento sin receta que te han recomendado para el dolor al salir del hospital.

RETOS DE LA LACTANCIA: ¿Cómo puedo prevenir el dolor de los pezones?


  • Contacta una asesora de lactancia lo más pronto posible. Ella te puede ayudar a diagnosticar la causa del dolor, y puede trabajar con otro especialista de forma conjunta de ser necesario. Una vez que sepan la causa del dolor, la solución suele ser simple. 

Si el dolor se debe a la mala colocación de tu bebé al pecho, prueba lo siguiente:


  • No empujes el pecho en la boca del bebé, espera a que abra bien la boquita y entonces acerca suavemente su cabecita a tu pecho.

  • Coloca a tu bebé en el pecho de manera que todo su cuerpo esté volteado hacia tu cuerpo y no que tenga que voltear la cabeza para agarrar tu pecho.

  • Siéntate cómodamente. Si te sientas en la cama en lugar de una silla, o en una posición demasiado inclinada, puede que te sea más difícil colocar bien al bebé en el pecho. Prueba diferentes posiciones para amamantar, hasta que encuentres la que te sea más cómoda. Lee nuestro artículo ilustrado ¿Cómo lo sujeto? Posiciones y consejos para amamantar. 

  • Prueba usar un cojín o una almohada para apoyar tus brazos mientras sujetas al bebé.

  • Sostén bien tu pecho con la mano que tengas libre. ¡Algunos bebés se agarran con extrema firmeza al pecho si tienen la sensación de que se les va a escapar!

  • Asegúrate de sujetar a tu bebé cerca de tu cuerpo, brindándole firmeza y apoyo para que pueda concentrarse en succionar y no en tratar de mantenerse estable.

  • No retires al bebé de tu pecho sin antes romper la succión de sus labios colocando la punta de tu dedo en la comisura de su boquita, para después alejarlo del pezón.

  • Si el dolor dura más de 15 segundos, rompe cuidadosamente la succión y vuelve a colocar al bebé.

  • Estimula la bajada de la leche masajeándote suavemente los pechos o extrayendo manualmente un poco de leche antes de cada toma. Así el bebé tendrá que succionar por menos tiempo y tragará más a menudo.

  • Ofrécele primero el pecho que te duela menos.

  • No esperes hasta que el bebé llore. Aliméntalo cuando notes que empieza a buscar el pecho.

  • Viste ropa de telas transpirables y naturales, y evita las almohadillas protectoras para brasier que tengan plástico.


RETOS DE LA LACTANCIA: ¿Cuál es la causa del dolor?






  • Colocación incorrecta del bebé en el pecho. Es un problema común que el bebé no agarre una porción suficientemente grande del pecho. Lo ideal es que su boquita cubra la mayor cantidad posible del círculo oscuro que rodea al pezón (la areola). Si cuando tu bebé deja el pecho notas que el pezón tiene la forma de un lápiz labial nuevo, o si ves una raya o borde que cruza el pezón por en medio, eso significa que tu bebé necesita agarrar una parte más grande de la areola. Una asesora en lactancia o una enfermera especializada te pueden ayudar a colocar bien a tu bebé en el pecho.


  • Herida causada por el uso de extractor. Utilizar incorrectamente un extractor de leche también puede dañar tus pezones. Podría ser que las copas extractoras son muy pequeñas para tus pezones. Algunas mujeres usan el nivel de extracción muy alto y eso las lastima. Pregunta a una asesora en lactancia cuál es el mejor extractor para ti y pídele que te enseñe a usarlo correctamente.
  • Infección conocida como algodoncillo o candidiasis. En caso de algodoncillo o candidiasis, tendrás los pezones y areolas rojizos, resecos o agrietados, y te picarán o arderán. Puede que notes puntitos blancos en la boquita de tu bebé, no sólo en la lengua sino también en el interior de las mejillas y en las encías. (Es posible que tengas una infección por hongos aunque no se vean estas áreas blanquecinas.) Si crees que podrías tener una infección en los pezones, comunícate con tu médico, el pediatra de tu bebé y una asesora de lactancia para que puedan evaluar y tratar el problema.

  • Piel extremadamente seca o eczema. Si tienes eczema puedes notar en tu piel pares rojas, sentir comezón o dolor. Si crees que tienes eczema consulta un dermatólogo.
  • Bebé con lengua atada o frenillo corto. Algunos bebés tienen el frenillo corto (un pedacito de piel que está debajo de la lengua) y esto impide el movimiento completo de la lengua y no les deja sacarla lo suficiente como para cubrir la encía inferior. Si el médico de tu bebé determina que tiene frenillo corto, se puede solucionar con una cirugía menor. El médico te podrá decir si la lengua de tu bebé era la causa del dolor en los pezones.


  • Ampolla de leche. Ocurre cuando una capa delgada de piel crece sobre un conducto de leche, lo que ocasiona que el conducto se tape. La ampolla se ve como un punto blanco o amarillo en el pezón y puede causar dolor al tacto. El dolor también se puede sentir atrás del punto. Consulta un asesor de lactancia o a tu médico para tratar la ampolla, tendrán que quitarla, de otra forma tardará semanas en sanar sola.
  • Ampolla de pezón. Una ampolla de pezón es una ampolla amarilla o ensangrentada sobre el pezón que causa un dolor intenso mientras amamantas. Frecuentemente, la causa de esta ampolla es la succión a partir de una mala colocación del bebé al pecho. También son causadas por usar un extractor en potencia demasiado fuerte.
Una razón menos común para sufrir ampollas es la dermatitis causada por una reacción de la piel a cremas o medicamentos en el pezón. Deja de usar cremas o medicinas en los pezones hasta que un dermatólogo determine qué tipo de ampolla tienes.

Si tienes antecedentes de herpes, la ampolla podría estar relacionada. Deja de amamantar y consulta a tu médico o una asesora de lactancia. Podrías transmitir el herpes a tu bebé si lo alimentas con un brote en el pezón. 

Será seguro amamantar a tu bebé de nuevo cuando la herida haya sanado. Hasta entonces necesitas evitar que la producción de leche disminuya y que los senos se te inflamen extrayéndote la leche (pero deséchela, no se la des a tu bebé). Si solo uno de tus senos está afectado puedes amamantar mientras tanto con el otro. 

  • Vasoespasmo. Si tu pezón se ve pálido y comienza a doler unos pocos segundos o minutos después de amamantar, y después regresa a su color normal, podrías tener un vasoespasmo. Esto significa que la sangre no puede pasar y es causado por una lesión en el pezón o por una infección. Una asesora de lactancia te puede ayudar a identificar la causa. Un tipo de vasoespasmo menos común es el llamado “fenómeno de Reynaud.” Este se suele sentir en ambos pezones al mismo tiempo y puede durar unos minutos. Generalmente se dispara con el frio. Consulta a tu médico para un tratamiento y a una asesora de lactancia para superar este padecimiento.